EL CUIDADO DE LOS RIÑONES
DOS PODEROSOS FILTROS
Los riñones funcionan como
dos poderosos filtros que, a través de millones de diminutas unidades
microscópicas, las nefronas, eliminan las impurezas de la sangre y el exceso de
agua de nuestro cuerpo a través de la orina. Los aproximadamente cinco litros de
sangre que circulan en nuestro interior son filtrados unas 30 a 40 veces por
los riñones diariamente, lo que significa que cerca de 200 litros de sangre son
procesados día a día para eliminar alrededor de dos litros de productos de
desecho y agua de exceso. Además de esta colosal función los riñones regulan la
tensión arterial, los niveles de calcio, minerales y la producción de glóbulos
rojos.
FUNCIONES
DE LOS RIÑONES
Además de eliminar
desechos, los riñones liberan tres importantes hormonas: la eritropoyetina,
que estimula a la médula ósea para producir glóbulos rojos, la renina,
que regula la presión arterial, y el calcitriol, que mantiene el
calcio para los huesos y el equilibrio químico normal en nuestro organismo.
ENTENDIENDO
CÓMO FUNCIONAN PODREMOS MANTENERLOS SANOS
En un sistema urinario
normal, la vejiga puede almacenar hasta dos tazas de orina sin urgencia de
orinar por 2 a 5 horas. Si la frecuencia es menor, probablemente se está
cursando algún problema que podría derivar en una futura patología. Si al
orinar fuera reiterativo tener una sensación de vaciamiento incompleto de la
vejiga y/o dolor, debemos anticiparnos y prevenir una futuro problema de la
función renal, tratando oportunamente la infección urinaria que pudiera
subyacer, o la posibilidad de un adenoma prostático o agrandamiento de la
próstata que se esté originando, o simplemente una recidiva de cistitis que
esté causando alguna obstrucción que impide vaciar la vejiga
satisfactoriamente.
¿CUÁNDO
FUNCIONAN MAL LOS RIÑONES?
Los riñones funcionan mal
cuando la orina es muy escasa, turbia o espumosa, si se sufre de edemas o
hinchazón de los tobillos durante el día, o en caso de una orina muy clara. Una
cantidad excesiva de orina (3 a 4 litros por día) pudiera estar revelando un
cuadro diabético. Todas estas alteraciones pueden ocasionar graves problemas a
los riñones si no son atendidas a tiempo.
SINTOMAS
DE PROBLEMAS RENALES
Sentir urgencia por orinar
con más o menos frecuencia, pudiera ser el primer signo. Una orina espumosa, es
un claro signo de que la sangre tiene demasiada proteína. Una orina de color
rosado o de bebida cola pudiera estar acusando la presencia de sangre.
El cansancio y la fatiga,
pueden estar asociados a problemas renales. Picores y erupciones en la piel,
sabor metálico en la boca, náuseas y vómitos, sufrir de frío, vértigo, mareos
y/o problemas de concentración, dolor de piernas o en los costados y calambres,
son todos síntomas que están asociados con problemas de la función renal.
Los riñones se pueden
inflamar, degenerar, inflamar su pelvis, sufrir de arterioesclerosis de las
arterias renales, cálculos del riñón, hemorragia renal descenso de los riñones
o un tumor maligno de riñón.
RIESGOS
DE ENFERMEDAD RENAL
Las personas que presentan
mayor riesgo de padecer una enfermedad renal son quienes padecen de diabetes,
presión arterial alta (hipertensión) alguna enfermedad cardiovascular y/o
antecedentes familiares de falla de los riñones.
CÓMO
CUIDAR LOS RIÑONES
Para un cuidado efectivo de
los riñones debemos mantener nuestra presión arterial normal y estable, los
niveles de colesterol deben estar dentro de los niveles recomendados, en caso
de diabetes se debe monitorear los niveles de glucosa en la sangre para lograr
un nivel de glicemia normal, en hipertensión reducir la sal, incorporar
alimentos saludables para el corazón, como frutas y vegetales frescos, granos
integrales, etc. evitar el alcohol, como también el sedentarismo, incrementar
la actividad física, y dejar el tabaco, pues este último agrava el daño
renal, además debemos cuidarnos de las infecciones microbianas.
Si sufre de diabetes,
cálculos renales o inflamación de la próstata, trate estos problemas a tiempo a
través de medios naturales evitando los peligros de la química. Evite ponerse
sondas, tampones o diafragmas, pues pueden infectar sus riñones.
Aliméntese adecuadamente,
evite las grasas saturadas, los alimentos salados, los azúcares, las harinas
refinadas, etc. Su dieta debe ser rica en fibra y en alimentos ácidos, pues una
orina ácida evita la proliferación bacteriana patógena. Consuma arroz integral,
pues sus propiedades previenen las enfermedades renales.
Beba abundante agua de buena
calidad, entre dos y tres litros diarios, pues una de las causas de trastornos
renales es la ingestión de poco líquido, o una orina poco ácida. Combata el
sobrepeso y la obesidad, pues es una de las principales causas de trastornos
renales. Finalmente adopte una alimentación equilibrada y evite el
sedentarismo.
EL DIAGNÓSTICO IRIDOLÓGICO A TIEMPO PUEDE
PREVENIR PROBLEMAS RENALES FUTUROS
Cerco de costra que muestra una piel tóxica con una deficiente función
eliminadora lo cual compromete la función renal.
MANCHAS DE UROSEÍNA
El irisdiagnóstico es
fundamental en la prevención de las enfermedades renales. Los primeros signos
en el iris que acusan una disfunción renal en curso son manchas de uroseína,
pigmentaciones de color amarillo claro que colorean ciertas zonas del estroma o
tejido iridiano. Esta coloración amarillenta se debe a la presencia de
carotenoides, y se relaciona también con un exceso de ingestión de productos
azufrados.
Este tipo de manchas
indican insuficiencia depurativa de los riñones, pudiendo ampliarse a
alteraciones del sistema genitourinario. Si el pigmento amarillo tiene un tono
sucio o turbio nos indicará que el padecimiento es de tipo crónico. Si el
amarillo es muy oscuro, nos encontramos en la frontera con las manchas de
rufina, indicando que los problemas de insuficiencia renal, se están
trasladando hacia problemas pancreáticos. Cuando
en la zona renal del estroma del iris se puede observar una laguna con borde
endurecido, es un claro signo que indica una insuficiencia de la función renal,
cuya causa, puede derivar de tóxicos del último tramo del intestino delgado o
del sigmoides, cuyos venenos han comprometido progresivamente la función renal.
La presencia de un signo
renal siempre nos facilita información sobre el estado de la piel y otros
órganos de eliminación de tóxicos y sustancias de desecho del organismo, tales
como la piel, los pulmones, el hígado, y el sistema linfático, información muy
valiosa para establecer el tratamiento, generalmente de derivación que alivie
la sobrecarga o deficiencia renal. Cuando observamos en el iris un signo de
déficit de función (en el riñón o en cualquier otro órgano), el signo está
indicando que es contraproducente prescribir un tratamiento que moleste o
sobrecargue a dicho órgano, pues podría fatigarlo y/o dañarlo seriamente.
Ahora bien, siempre cuando
se observan señales de congestión se debe establecer una terapia derivativa y
también depurativa, potenciando la función renal, pues no existe insuficiencia.
En todos los casos se debe establecer un tratamiento que involucre la función
de los riñones con la función de la piel, nuestro “tercer” riñón, que puede
descargar el excesivo trabajo del riñón y viceversa.
SUPLEMENTOS
ESENCIALES PARA UNA BUENA FUNCIÓN RENAL
Si hubiera retención de
líquidos es muy útil la Vitamina B6, la colina y el inositol, pues la reducen.
La vitamina C, con bioflavonoides acidifican la orina, estimulan el
funcionamiento inmunológico y ayudan a la curación de problemas renales.
Provechosos para la buena función renal son también el calcio y el magnesio,
para un correcto equilibrio de los minerales. El aminoácido L- arginina es muy
beneficioso en el tratamiento de las enfermedades renales, y la L – metionina
también pues mejora la circulación de los riñones. La lecitina es muy necesaria
para evitar y tratar la nefritis, juntamente con el complejo de vitaminas B,
siempre que sean naturales. El aceite de germen de trigo (vitamina E) prensado
en frío promueve la función inmunológica y destruye los radicales libres. El
zinc, es un potente estimulador del sistema inmunológico y necesario para
inhibir la cristalización y la formación de cristales en el riñón.
No se autoprescriba,
nuestro país, Chile, es el país más auto medicado del mundo. Evite riesgos y
recuerde que la salud es uno de los mayores tesoros y bienes que el hombre
posee.
PLANTAS
MEDICINALES
El arándano rojo es
fundamental para aumentar la acidez de la orina, destruir la acumulación de
bacterias y promover la curación de la vejiga. El diente de león (una
extraordinaria planta) fortalece la función de los riñones, elimina los
productos de desecho renal y es muy provechoso para la nefritis. La raíz de
hortensia y la gayuba (uva ursi) son excelentes diuréticos naturales, como
también el apio y el perejil, que controlan además los niveles altos de ácido
úrico en la sangre. El enfermo renal debe evitar consumir proteínas de origen
animal pues aumentan los niveles de ácido úrico. Para la limpieza de los
riñones la infusión de malvavisco es efectiva.
RECOMENDACIONES
El 75 % de la dieta debe
ser cruda, privilegiando el consumo de ajos, apio, espárragos, berros, perejil,
papas, pepinos, plátanos y papaya. Se debe consumir brotes y abundantes
vegetales verdes y frescos. Reducir el consumo de potasio (presente en lácteos,
pescado, carne, aves de corral, etc.) y fosfatos, (presente en huevos,
productos lácteos, salmón, cereales integrales, etc.) No utilizar sal,
evitar la remolacha, los huevos, la carne, el pescado, el chocolate, el cacao y
la acelga y beber siempre agua de buena calidad. Reducir o bien eliminar el
consumo de proteínas de origen animal es muy favorable, pues el exceso de
proteínas estresan los riñones, y un exceso acompañado de una pobre función
renal puede conducir a una uremia o tóxicos en la sangre; además no se debe
consumir ningún producto lácteo, excepto los agrios. Las potentes propiedades
de la espirulina reducen el envenenamiento de los riñones producido por mercurio
(especialmente por las conocidas amalgamas) y por fármacos, tales como el
ibuprofeno.
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