lunes, 10 de octubre de 2016





¿POR QUÉ SUFRIMOS DE COLON IRRITABLE?
A Hipócrates pertenece la famosa frase: “Sea el alimento tu medicina y la medicina tu alimento”. La frase: “somos lo que comemos” pertenece a Ludwig Feuerbach, filósofo y antropólogo alemán, nacido en 1804 en Landshut.
La frase: “Somos lo que absorbemos” perfecciona la idea Hipocrática y de Feuerbach, pues la correcta digestión y asimilación de los alimentos, están ligados a una serie de procesos absortivos interrelacionados.
LOS ALIMENTOS Y LA FLORA INTESTINAL DETERMINAN NUESTRA SALUD
Nuestros intestinos albergan alrededor de 100 trillones de bacterias (1 kilo aproximadamente) de las cuales un 85% son beneficiosas y un 15% perjudiciales. Nuestra salud depende de este equilibrio bacteriano. La dieta actual moderna, rica en azúcar e hidratos de carbono refinados, grasas saturadas, alimentos industrializados y pobre en fibra, altera el equilibrio entre las bacterias, multiplicándose las perjudiciales y disminuyendo las beneficiosas que nos protegen, vulnerando nuestro organismo frente a la enfermedad.
El Dr. Jean Seignalet vinculó la alimentación moderna con las enfermedades autoinmunes, por lo cual diseñó una exitosa dieta que aplicó en sus pacientes. En su publicación “LA ALIMENTACIÓN, LA TERCERA MEDICINA” expone las bases de una dieta sana y curativa/preventiva para muchas enfermedades.
La idea básica es que los “alimentos modernos” al estar “modificados” alteran nuestro sistema digestivo diseñado solamente para digerir alimentos “ancestrales”, vale decir, alimentos saludables no intervenidos de los cuales se alimentaban nuestros antepasados.
SEGUNDO CEREBRO

Los alimentos no saludables entorpecen la inteligencia digestiva que está en los intestinos, considerado como segundo cerebro. Y esto es cierto pues el 90 % de la serotonina, la hormona del bienestar, se produce en el intestino, y solo un 10% en el cerebro.


¿QUÉ ESTÁ AFECTANDO LA INTELIGENCIA DIGESTIVA E INMUNITARIA?

La alteración genética de los cereales provocada por la agricultura y la cocción a altas temperaturas de los alimentos que modifica la estructura de las proteínas. Dichos cambios impiden su completa digestión, alterando el equilibrio de la flora intestinal, que pasa de fermentiva (fisiológica) a putrefactiva (no fisiológica) generando tóxicos que pasan al torrente sanguíneo por un intestino permeable. El ingreso de estos venenos altera el equilibrio general orgánico, promoviendo fenómenos eliminativos, acumulativos y autoinmunes como veremos a continuación.
En primer lugar, la eliminación de estas toxinas por el organismo da lugar a “patologías” denominadas ENFERMEDADES DE ELIMINACIÓN, tales como: colon irritable, colitis ulcerosa, enfermedad de Crohn, gastritis, reflujo gastroesofágico, acné, eccema, urticaria, psoriasis, bronquitis, sinusitis, rinitis, conjuntivitis, etc.
En segundo lugar, si las toxinas se acumulan en órganos y tejidos da origen a ENFERMEDADES POR ACUMULACIÓN, como por ejemplo, fibromialgia, tendinitis, artrosis, osteoporosis, gota, migraña, cefalea tensional, depresión endógena, enfermedad de Alzheimer, Parkinson, diabetes 2, angina de pecho, arteritis, litiasis biliar, glaucoma, etc. 
Y en tercer lugar, el paso de toxinas, macromoléculas, microbios y proteínas extrañas de origen intestinal al torrente sanguíneo genera ENFERMEDADES AUTOINMUNES por la excesiva estimulación del sistema inmune. Ejemplos son: poliartritis reumatoide, espondiloartrosis anquilosante, reumatismo psoriático, artritis crónica juvenil, reumatismo inflamatorio, lupus eritematoso diseminado, esclerodermia, lupus cutáneo, enfermedad de Graves – Basedow, tiroiditis de Hashimoto, enfermedad celíaca,  neuropatía periférica, por nombrar algunas de ellas.
¿CÓMO PODEMOS EVITAR ESTAS ENFERMEDADES POR INTOXICACIÓN DEL ORGANISMO?
Preservando la inteligencia digestiva radicada en los intestinos, por medio de una correcta alimentación, puesto que…SOMOS LO QUE ABSORBEMOS. LA DIETA CORRECTA CONSISTE EN INGERIR ALIMENTOS NO MODIFICADOS Y QUE SEAN TOTALMENTE ASIMILABLES.
EL TRIGO
Evite el consumo de trigo, que es rico en omega 6, ácido graso que contribuye al desequilibrio entre las grasas omega 3 – omega 6, factor de muchas patologías inflamatorias, sobre todo intestinal, inflamación vinculada con las principales enfermedades mentales.
LOS CEREALES
Evite los cereales que causan permeabilidad intestinal al contener antinutrientes y lectinas que dañan la pared del intestino. He comprobado a través del examen del iris de cientos de pacientes que la gran mayoría de ellos sufren de permeabilidad intestinal aumentada en mayor o menor grado.

PERMEABILIDAD INTESTINAL AUMENTADA
EL GLUTEN
Elimine el gluten. Muchos estudios hoy relacionan EL GLUTEN como el origen de la depresión, pues al ser procesado con aceites modificados genéticamente y formar parte de alimentos procesados de alto índice glicémico, aumentan la ZONULINA, proteína de importante rol en la permeabilidad intestinal y de la barrera hematoencefálica.
LA INFLAMACIÓN CRÓNICA DEL INTESTINO inducida por las lectinas provoca una respuesta inflamatoria sistémica por los anticuerpos contra la GLIADINA y GLUTENINA, componentes del gluten, EN TEJIDOS DEL INTESTINO, CEREBRO Y TIROIDES. Los efectos de la intolerancia al gluten provocan cuadros depresivos, dolor de cabeza, ansiedad, desmielinización, hiperactividad, atención deficiente, esclerosis múltiple, neuropatías, etc.
El GLUTEN afecta AMBOS CEREBROS, intestinal y cerebral, pues al aumentar la permeabilidad intestinal permite que péptidos de gliadina viajen a través de la sangre estimulando los receptores opiáceos cerebrales (gliadorfinas) responsables del síndrome de abstinencia.
CARNES INTERVENIDAS
La carne de los animales cautivos alimentados con CEREALES es rica en ácidos inflamatorios omega 6. Evítelas. La carne de animales alimentados libremente en praderas (pastizales) produce carne rica en omega 3. La alimentación de animales cautivos es a base de soja y maíz transgénico, además tratados con hormonas, medicamentos y antibióticos. La “alimentación modificada” es introducida en estos animales a través de fistulas.
CARNE DE AVES MODIFICADAS
Los pollos actuales, alimentados artificialmente crecen en solo 8 semanas. En circunstancias normales alcanzarían el mismo peso en un año.
ARROZ Y ARSÉNICO
El arroz que comemos tiene altos niveles de arsénico, pues absorbe 20 veces más el metaloide que el resto de los cereales. Este semimetal se va almacenando poco a poco en nuestro cuerpo.
SUELOS Y PLANTAS CONTAMINADOS
Los suelos que nos sustentan están contaminados, y los microorganismos beneficiosos de plantas (probióticos, que nos ayudan a digerir los alimentos y a mantener a raya los patógenos) han sido exterminados por pesticidas y herbicidas.
SÍNTESIS
En síntesis, la dieta moderna, los alimentos modificados y un entorno lleno de químicos peligrosos, sumado al uso excesivo de medicamentos, incrementan el número de bacterias perjudiciales del tracto intestinal, desorientando la inteligencia digestiva, alterando la permeabilidad intestinal e invadiendo tejidos y órganos internos de tóxicos intestinales.
MICROBIOTA INTESTINAL MODIFICADA
De los 100 trillones de bacterias que pueblan nuestros intestinos, el 85% deben ser beneficiosas. La mayoría de las personas tienen el ratio de manera inversa, un 15% de bacterias beneficiosas y el 85% de nocivas, situación que afecta enormemente al sistema digestivo e inmune, promoviendo las enfermedades.
TRATAMIENTO
Si sufre de colon irritable evite el gluten, cereales modificados, alcohol, café, antiinflamatorios químicos, alérgenos alimentarios y metales pesados. Restaure la flora intestinal con probióticos e incorpore enzimas digestivas. Fortalezca la pared intestinal con glutamina, zinc, y alimentos como cúrcuma, jengibre, romero y lúpulo. Tome vitamina C no ácida, vitaminas del complejo B y ácidos grasos omega 3.


RECUERDE…LA MEJOR CURA ES LA PREVENCIÓN
                                                                                       


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           jaimepachecocabeza.wix.com/naturamedicatrix





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